Este caso es el de una finca cerca del poblado de La Monta en Sevilla, de riego en marco de cultivo intensivo y sembrada de olivo de aceituna manzanilla sevillana destinada al verdeo.
Al ser una finca que se poda todos los años, este año tiene una poda muy ligera llegando a una media de entre 60 y 70 arboles por persona.
En la figura 1 podemos apreciar que el árbol esta montado en 2 patas, cada una mirando a un lateral puesto que la separación entre árboles está entorno a los 3 metros, al acceder al árbol lo primero que hacemos es retirar el esvarillo o brote que sale en el pie del árbol como podemos ver en la figura 2.
En la figura 3 podemos ver la cantidad de brotes revocados o con nacimiento interno, estos brotes lo que hacen es tirar de la corriente de sabia lo que dificulta dar una buena producción y buen calibre de la aceituna, es por eso que los retiramos. En la figura 4 ya los podemos ver retirados
Sólo retiramos todo aquel chupón o rama que tenga un grosor mayor al de medio centímetro, de este modo no dejamos las palancas al descubierto evitando tanto quemaduras del sol como del frio.
En la figura 5 podemos apreciar uno de los cortes que es de un grosor de entorno a los 2 centímetros y que por su altura se realiza con una sierra pértiga manual. En este árbol no a hecho falta, pero en el caso de tener las faldas cargadas se habría procedido a retirar algo de leña para aliviar las capas.